jueves, 26 de abril de 2012

¿Estamos realmente solos?

Hola compañeros. 
En mi entrada de esta semana me gustaría hablar sobre si realmente estamos solos. No me refiero a si existe vida fuera de nuestra planeta y temas así relacionados, me refiero a si en ocasiones cuando por algún problema o cualquier causa tenemos un bajón anímico o moral, y creemos encontrarnos solos en el mundo, sin nadie que nos ayude, estamos realmente solos.
Bien, yo pienso que no. Nunca, aunque nosotros creamos lo contrario, estamos realmente solos. Siempre quedará algo o alguien que se encuentre ahí, a nuestro lado, dispuesto a darnos su ayuda en el momento en el que se  la pidamos. El problema que muchos tenemos, es, que cuando nos llega ese bajón o ese problema, en ocasiones resulta ser tan grande que nos impide ver que esa ayuda se encuentra ahí y es en ese momento cuando empezamos a pensar que estamos solos, y finalmente en muchas ocasiones llegamos a creérnoslo.
Cuando lleguemos este momentos no debemos dejarnos llevar por la tristeza, ni debemos estar ''ciegos'', tenemos que buscar esa ayuda, vale que podemos tardar tiempo en encontrarla pero finalmente ''el que la sigue la consigue'', porque como bien he dicho esa ayuda siempre esta ahí, dispuesta para que le demos uso y podamos salir de nuestro problema. 
Esa ayuda que yo menciono normalmente suele ser una persona, un amigo o familiar, que siempre está a tu lado y nunca te decepcionará y que lo único que probablemente te pida a cambio sea que tú también estés ahí a su lado cuando él precise de tu ayuda. Él siempre intentará animarte con un chiste, recordando buenos tiempos pasados o simplemente estando a tu lado, luchando contigo. Y creerme que cualquier cosa o detalle que tenga con nosotros, por mucho que lo consideremos insignificante, nos resultará muy beneficioso y nos ayudará y algún día nos daremos cuenta, poco a poco, que al contrario de como nosotros creíamos siempre tuvimos a alguien a nuestro lado que nos apoyó, alguien que estuvo junto a nosotros para que, al cabo de un tiempo despertáramos y nos diésemos cuenta de que no estábamos solos como nosotros creíamos.
Por último y ya para concluir me gustaría poner y comentar brevemente esta cita de Dulce María Loynaz que dice:
''No es difícil llorar en soledad, pero es casi imposible reír solo''
Creo que esta cita refleja muy bien lo anterior expuesto. Podemos estar deprimidos y sentirnos ''solos'' e incluso llorar, y todo esto podemos hacerlo sin la compañía de nadie, pero para volver a reír siempre necesitaremos a alguien que consiga dibujar una gran sonrisa en nuestra cara y devolvernos la felicidad.

domingo, 15 de abril de 2012

De ilusiones también se vive.

Hola compañeros. Después de mucho tiempo sin escribir por qui me gustaría retomar la tarea hablando de un tema del que durante estas vacaciones he estado reflexionando. Las ilusiones. ¿Qué entendemos por ilusión?
¿Están presentes en nuestro día a día? ¿Las seguimos y nos guiamos por ellas?.
Bien, seguro que muchos de nosotros tenemos un concepto general en cuanto al término ilusión se refiere. Llamamos ilusión a esa especie de cosquilleo que hace que tengamos deseo por la cosas, que anhelemos la llegada de un momento, familiar, amigo, etc.
Todos hemos tenido alguna vez, como mínimo, ilusión por algo en la vida, incluso aquellas personas que ponen en entredicho que tener ilusiones sirva de algo en la vida. Bien, yo pienso que una ilusión por mínima que sea hace que nuestro día a día y nuestra vida en si llegue a ser más llevadera, incluso en algunos casos traiga la felicidad en momentos de tristeza y melancolía. Pongamos un breve ejemplo: supongamos que un día tus padres te dan la grandísima noticia de que en unos meses tendrás un nuevo hermano, una nueva persona que llega a la familia. En la mayoría de los casos, esta llegada al mundo de un nuevo ser, suscita en los miembros de la familia y allegados una gran ilusión, aunque también es cierto que puede haber excepciones y esta llegada al mundo no sea esperada con tanta o ninguna ilusión, pero eso como bien he dicho suele ser una minoría. En los casos en que sí, suscita ilusión por saber como será, cual sera su color de pelo, si lo tendrá rizado o liso, si tendrá los ojos azules... Todo este conjunto de preguntas generan a su vez un conjunto de ilusiones que hacen que en la familia se cree un clima de bienestar y felicidad y todo ello gracias a las ilusiones despertadas en los miembros de la familia por la llegada al nuevo mundo de esta pequeña bendición.
Con esto, y ya para concluir, reafirmar que sí compañeros, de ilusiones también se vive y os puedo asegurar que mucho mejor que aquellos que aseguran que una ilusión, ya sea por un nacimiento, un viaje que vas a emprender, el día de tu boda o cualquier otra cosa, no sirve de nada en la vida.